13 horas en Viena, Paula Gallego

Titulo: 13 horas en Viena
Autora: Paula Gallego
Editorial: Kiwi
Páginas: 368
Saga: No
ISBN: 9788416384624
Sinopsis: Kat era divertida, apasionada y atrevida, pero sobre todo era intensa; la clase de chica por la que Erik sería capaz de perder la cabeza. Ambos hicieron un trato hace tres años: vivir un amor perfecto durante solo 13 horas y decirse adiós para siempre; jamás volverían a saber del otro y el recuerdo de esa noche en Viena permanecería intacto. Sin embargo, el destino es caprichoso y ha querido que se vuelvan a encontrar en París. Kat está decidida a no cometer un error que pueda estropear lo que tuvieron, pero el deseo puede ser devastador y persuasivo, y ambos tendrán que tomar una decisión: ¿Intentarán preservar el recuerdo de su primer amor manteniéndose alejados, o renunciarán a él y se arriesgarán a perderlo todo?

Decidí leer este libro porque quería comenzar el 2018 con una historia ligerita, que me cautivara y con la que no tuviera que complicarme demasiado, y este libro ha cumplido con todas esas expectativas además de enamorarme demasiado. 

Kat es una chica francesa que ama el boxeo por encima de todas las cosas, hace tiempo dejó los estudios para centrarse en el deporte y vive su vida de la forma que más feliz le hace. No se plantea tener relaciones complicadas, sino disfrutar del momento y olvidarse de sentimientos. Por otro lado, Erik es un chico noruego, estudiante de artes escénicas y enamoradizo. Ambos se conocerán en un campamento de deportes en Viena y vivirán una experiencia inolvidable, pero no todo puede ser eterno, no todo puede ser bonito y lo único que se dan el uno al otro son 13 horas. ¿Podrán seguir sus vidas después de eso? 

Lo primero que quiero destacar de este libro es lo mucho que me ha gustado que la autora nos contara la historia a la vez, es decir, se irán sucediendo capítulos entrelazados de Erik y Kat en los que él nos contará que sucedió hace tres años entre ellos, mientras que ella nos cuenta los sucesos actuales de su vida. Me ha parecido una idea genial porque vemos en realidad lo que pasaba, y no es solo un recuerdo de uno de los personajes, además de que podemos ser testigos de los sentimientos de Erik en el pasado y también los sentimientos actuales de Kat.

El amor es complejo, de todas las formas y colores. También es un poco canalla, le gusta el juego y el enredo y, si consigue engancharte, probablemente te gane la partida.

Por otra parte, me ha gustado mucho como la autora ha llevado la historia, como se van sucediendo las cosas entre los personajes y como te engancha a la trama aunque no sea muy elaborada o compleja. Además, es muy bueno ver como se expresan Erik y Kat en sus respectivos capítulos, sus sueños, sus ambiciones y, como dije antes, sus sentimientos. Son dos personajes que ven la vida de una forma diferente, que pueden ser muy contrarios pero en realidad son lo mejor el uno para el otro, y ver como se va fraguando la historia de amor me ha encantado. Esta se cuenta con mimo, vemos como van sintiendo poco a poco atracción entre ellos para pasar a sentimientos mayores y como terminan enamorándose. Todo ha sido muy bonito y especial. 

Como ya he nombrado demasiado a los personajes principales voy a centrarme un poco en los secundarios como Kenny, el hermano mayor de Erik. Kenny es un personaje bastante importante en la historia, a mi modo de verlo, ya que es el nexo entre los dos en algunas tomas de decisiones. Hará que Kat se de cuenta de sus verdaderos sentimientos y le dará razones para que cambie su vida. Es un personaje que se va haciendo querer mientras se sucede la historia. 

El final del libro me ha parecido muy tierno, aunque personalmente me hubiera gustado que la autora siguiera un poco más con la trama, pero imagino que lo ha dejado en el aire para que nosotros imaginemos como siguió todo o para continuar un poco en segundo plano en su continuación (donde Kenny es el protagonista y ya tengo ganas de ver que va a suceder con él). Igualmente me pareció un final muy correcto para esta bonita historia y no lo cambiaría. 

En definitiva, 13 horas en Viena es una historia de amor muy bonita y tierna donde nos presenta a dos personajes que pueden ser contrarios, pero en verdad no son tan diferentes y son la pieza que le falta al otro. Un libro donde descubrir los verdaderos sentimientos de los personajes es una experiencia preciosa.

Muchas personas creen que ver a alguien quitarse la ropa es lo mismo que verla desnudarse. Se equivoca. Yo me he quitado la ropa muchas veces, delante de unos cuantos tíos. Pero nunca me he desnudado.
Desnudarse significa exponerse; darle a alguien la oportunidad de hacerte trizas el corazón y confiar en él lo suficiente como para esperar que no lo haga. Es un acto de fe, y un delirio de esperanza ciega.