Cambiando el juego, Jaci Burton

Titulo: Cambiando el juego
Autora: Jaci Burton
Editorial: Pàmies
Páginas: 299
Saga: #2 Play by Play (2/10)
ISBN: 9788416331017
Libro enseñado en: IMM Vlog 41
Sinopsis:La mayoría de la gente sigue las reglas del juego, pero Gavin y Liz no son como los demás...<<Ganar a cualquier precio>>. Ese ha sido siempre el mantra que la agente deportiva Liz Darnell se ha repetido a sí misma durante toda su vida. Cuando va demasiado lejos y corre el riesgo de perder a su cliente más importante, el jugador de béisbol Gavin Riley, Liz se da cuenta de que va a tener que emplearse a fondo para evitarlo. Aunque lo cierto es que tampoco supone un esfuerzo demasiado grande: a fin de cuentas ha seguido cada movimiento del jugador desde que se fijó en él por primera vez... y no fue de una manera precisamente profesional. Pronto Liz se da cuenta de que Gavin está más que dispuesto a seguirle el juego.A Gavin no le importa nada caer en las redes de Liz. La desea tanto como ella parece desearle a él. Dispuesto a comprobarlo, decide lanzarle una bola curva para ver lo lejos que está dispuesta a llegar para mantenerlo en su carrera. Sin embargo, el amor comienza a formar parte del partido de manera inesperada y ni Liz ni Gavin están preparados para ese cambio de juego.

Saga: #2 Play by Play (2/10)

#1. La jugada perfecta [Reseña]

#2. Cambiando el juego

#3. Apostando para ganar [Publicación en junio de 2015]

#4. Playing to win [en inglés]

#5. Thrown by a curve [en inglés]

#6. One sweet ride [en inglés]

#7. Melting the ice [en inglés]

#8. Straddling the line [en inglés]

#9. Quarterback draw [en inglés]

#10. All wound up [publicación en 2015 en inglés]

Con la bajada de lecturas me apetecía una historia simple pero atrayente, y no se me ocurrió mejor lectura que esta. Continuación de una saga bastante larga, pero que cada libro se puede leer independientemente, además de ser de uno de mis géneros prelidectos, la romántica. 

Gavin es el hermano pequeño de Mick, protagonista del libro anterior, que juega en la liga más importante de béisbol de Estados Unidos. Es un mujeriego que no tiene pensado buscar una mujer con la que formar una familia, pero entonces se encuentra con Liz su agente. Elizabeth lleva enamorada de su cliente desde que lo conoció, pero siempre ha querido mantener las distancias con él y nunca mostrarle sus sentimientos, quiere ser con él muy profesional. Pero cuando Gavin comienza a prestarle la atención que antes no le mostraba Liz no penderá la oportunidad de disfrutar del momento, pero ¿cuánto se puede alargar la felicidad? ¿Cuándo se cansará él de ella?

Los dos personajes principales de este libro ya los conocemos del anterior donde aparecen como secundarios, aunque Liz tiene un papel importante para los sucesos de esa historia. En esta ocasión veremos una faceta diferente de este personaje, y descubriremos porque aparenta ser una mujer tan fría, distante y arpía. Además de que conoceremos a Gavin, que fue un personaje que solo se nombro en pocas ocasiones, pero del cual no se dieron muchos detalles. No podemos olvidarnos de los personajes del primer libro, que se convierten en secundarios en este y que serán importantes para algunas decisiones en la trama.

La forma que tiene la autora de engancharte a la historia es espectacular. No se anda con rodeos sino que se lanza a la piscina desde el primer capítulo, para luego hacer que la historia avance con buen ritmo consiguiendo que no puedas soltarla hasta saber como ira hilando la relación de los personajes. Es curioso como consigue que la relación de Liz y Gavin pase de ser distante y un poco fría, a ser tierna y adorable, y como este cambio no resulta chocante sino todo lo contrario, es muy natural. 

Me gusta la forma en que recupera los personajes del primer libro y te muestra muy por encima como está su vida, además de que abre un poco las puertas a la historia que nos vamos a encontrar en el siguiente libro y sus protagonistas.

En definitiva, Cambiando el juego es un libro atrayente y entretenido que contiene una historia de amor contada de una manera tan natural que consigues creertela al cien por cien desde que comienza a forjarse.

-A veces, el mundo se cae a pedazos. A veces es tu propio mundo el que se desmorona. Y no pasa nada si dejas que la gente vea cómo te afecta.

Gracias a la editorial por el ejemplar